A veces parece que las ciudades ya no pueden crecer más, pero entonces un barrio periférico se industrializa y ocurre lo que todos nosotros deseamos: se empiezan a construir nuevos edificios y, en particular, nuevas viviendas. Es entonces cuando ingenieros, arquitectos, planificadores urbanísticos en general, unen sus fuerzas para diseñar los planos de las futuras construcciones. Por ejemplo, cuántos metros cuadrados tendrán, cuál será la distribución interior de las habitaciones, qué electrodomésticos básicos irán incluidos en la cocina, o cómo serán las puertas y las ventanas.

El acto de comprar puertas para edificios de viviendas o chalets está muy automatizado. Primero, hay que saber elaborar un listado de las puertas que vamos a adquirir y a instalar en cada edificio o casa, ya que no podemos comprar un solo modelo estándar para todo. La puerta de la calle de cada piso, por ejemplo, debe estar reforzada, mientras que para estancias como la solana o la terraza, en caso de haberla, pueden ser de cristal, también reforzado. Por otro lado, en alguna parte del edificio estarán los conductos del agua, y la puerta de entrada a este espacio debería ser de perfiles galvanizados, ya que el doble refuerzo que los caracteriza evita el traspaso del agua.

En cuanto al acto de comprar ventanas, funciona exactamente igual que las puertas. Para empezar, es muy importante tener en cuenta la incidencia de luz solar en la totalidad del edificio, y en viviendas concretas, pues no puede ser igual ni en todos los pisos ni en todas las habitaciones. En los salones especialmente bien ubicados para recibir la luz solar, la instalación de ventanales dobles debería ser la decisión más lógica. Por otro lado, las dimensiones de la vivienda serán determinantes a la hora de escoger ventanas que se abran en horizontal, o ventanas correderas de aluminio, material que además siempre se adapta muy bien a espacios como el cuarto de la lavadora.

En definitiva, la toma de decisiones sobre construir nuevas viviendas es relativamente fácil, pero no es tan sencillo tomar una decisión final con respecto a la planificación arquitectónica de las mismas.